¡Cuánto dan de si las depensas! Quien lo diría, porque siempre salen pequeñas. Colocas el último bote de tomate frito con cuidado para que no se caiga sobre tu pie cuando vuelvas a abrir la puerta y consigues salvar el paquete de galletas cuando la botella de aceite las iba a hacer migajas. Y, a pesar de todo, me gustan las despensas, especialmente si están llenas. Me gustan las despensas reales, las que tienen de todo, de tamaños y colores diferentes, desde conservas hasta legumbres, las que guardan el papel higiénico y las servilletas de cocina y un pequeño rincón para el cubo y la pala. Despensas de todo tipo: las que ocupan una habitación, las que están mezcladas con la loza, en la alacena, las que están en unas estanterías, las pequeñas, las grandes...
Me gusta la sensación de orden y abundancia (no opulencia) que muestran; la sensación de tranquilidad que da saber que durante un tiempo no tienes que preocuparte por hacer la compra. La abres y piensas: "hoy vamos a comer..." Es la materia prima que te permite crear algo rico y disfrutarlo con los demás. A medida que se vacía, organizo lo que queda para que ocupe todo el espacio. Ahora que lo pienso, debo ser como los antiguos griegos y su 'horror vacui' (horror al vacío). Será por eso que cada vez tengo más cosas, de todo tipo, todo lo que me ha dado por reciclar y que guardo para cuando se me ocurra qué hacer: las latas de leche condensada, los botes de cristal, las cajas de galletas vacías, los tubos de cartón del rollo de servilletas... Lo acabo de descubrir, no es por falta de espacio, ni porque ahora me haya entrado la fiebre del reciclaje y de las manualidades, es por el 'horror vacui'. Por cierto, también me pasa en la decoración del resto de la casa, no solo en las despensas.
vía: Trazos y trozos |
vía: Trazos y trozos |
vía: open Deco |
vía: facilisimo.com |
Por si tu despensa está desordenada y caótica (como la mía ahora mismo), en Decorchick nos enseñan como transformarla en una a la que te dan ganas de mudarte.
Incluso he encontrado un libro sobre la historia y usos modernos de las depensas.
¡Cuánto dan de si las despensas!
Qué manera tan elegante de decir "junta basura". Ahora voy a decir que sufro de "horror vacui". Las imágenes, buenísimas! Un beso!
ResponderEliminarQue la que tenga lugar suficiente y algo de orden en su despensa levante la mano!
ResponderEliminarAdemás, avisen a mi marido que sus herramientas van en otro lugar!!!
Beso, mujer de los pantanos!
En mi diminuta cocina solo tengo unas cuantas alacenas, mi sueño es una despensa para llenar de cosas lindas y mercaderia. Beso!
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