Fijación funcional: objetos de doble uso y objetos de nuevo uso.

Un objeto puede tener dos usos, estar diseñado para dos funciones diferentes, o puede tener un uso y nosotros darle otro. Transformar el uso habitual de un objeto es bastante difícil, porque nos cuesta ver que un colador o una taza puede ser una lámpara. Conocemos los objetos por su función y ese lazo es fijo. Romperlo es cambiar nuestra concepción del objeto. Pero cuando somos capaces de hacerlo, es tan divertido... 

Este globo terráqueo es globo terráqueo y además es lámpara:



Y, además, cuando está encendido se ve mejor todo lo que muestra como globo terráqueo. También da una luz de ambiente muy bonita. Este lo tengo en casa, pero en http://www.elchiltepe.com/ pueden encontrar otros ejemplos.

Hace quince años me compré en Ikea un perchero de metal con forma de hombre, que ha hecho su función durante todo este tiempo. Pero ahora ya no me gustaba en el dormitorio, aunque me seguía gustando como objeto, así que le cambiamos su función. Superamos la fijación funcional. Ahora es una lámpara (lo siento, estoy fijada con las lámparas).