Jabones y flores

I

El viernes empezó bien. Mejor dicho, empezó ayer, jueves. Ayer llegué a casa y había un aviso de correos. Algo que esperaba y no podría recoger hasta hoy. Y el día de hoy llegó, lo recogí y aquí está

Me lo envía Cristina de El gallinero de Miss Marple. En uno de sus post habló de los intercambios y le propuse que hiciéramos uno. Yo iba con ventaja, lo reconozco, porque conocía sus maravillosos jabones artesanales (en otra entrada ya les mostré los jabones de Cristina que tengo en casa). Cristina aceptó el intercambio y yo le envié unos marcapáginas de tela. Y ella me envió esos dos jabones que ves en la imagen. Primorosamente envueltos y con un aroma que, difícilmente, puedo describir. Sólo te digo que un recuerdo bastante antiguo y olvidado a zumo de naranjas lleno de galletas María picadas revivió. Los jabones son de naranja y de ¡galleta! 

Y la galleta y la naranja llenaron todo el salón. Sí, en el salón, porque su olor dura mucho más que el de cualquier ambientador y, antes de usarlos los dejo para que llenen de aroma la casa.

Mi bandeja de jabones antes

Mi bandeja de jabones ahora

No son sólo aromáticos, suaves y delicados con la piel, sino que, además, abren el apetito que es un gusto.

 II

En contra de las previsiones, las flores del último fin de semana apenas duraron seis días. Así que hoy estreno flores nuevas. Sólo dos, pero muy bonitas, raras y bonitas, un placer para la vista.

Son Heliconias bihai, y lo sé gracias al blog de María la Delsa donde las encontré. Aquí las dejo para que las disfruten el fin de semana.

¡Feliz fin de semana con flores y olorosos jabones!